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Resumen:
Situar psicofármacos y psicoanálisis en los discursos prevalentes. A partir de la idea de "estructura de emplazamiento" (Gestell), en Heidegger, se consideran los psicofármacos como estructura de emplazamiento química. Se discurre sobre la narcosis del deseo y el olvido de la verdad. Se plantea la cuestión de la causalidad en la ciencia y del psicoanalista actuando a nivel de la causa.
Palabras claves: discursos - estructura de emplazamiento - verdad - causa.
1.INTRODUCCIÓN
Este trabajo se propone cuestionar el lugar y los efectos de la clínica psicoanalítica en la época de los psicofármacos en un momento de creciente avance y predominio de estos últimos como recurso terapéutico frente a los trastornos psíquicos. Después de un siglo de psicoanálisis, se impone una indagación de los discursos hoy prevalentes, que entendemos, asumen en su gran mayoría, una posición prefreudiana," anti-psicológica"(2) propiciando la utilización de los psicofármacos como recurso terapéutico con fundamentos científicos, basado en avances sofisticados de la química y de la biología. A partir de aquellos discursos, resulta excluido el inconsciente freudiano, retomado por Lacan como sujeto del significante, dividido por el lenguaje y sus leyes, sujeto del deseo y del goce, de la castración y de las diferencias sexuales.
Los efectos subjetivos, si es que los hay, o des-subjetivantes (3), parecen haber sido relegados del debate.
¿ Se trata de una química de efectos cosméticos, maquillaje adecuado a los tiempos que corren?. ¿Esta alta tecnología química operaria como camuflaje contemporáneo, viniendo a desplazar rótulos, vestiduras y disfraces anacrónicos?.La idea de efectos cosméticos apunta a la relevancia de cambios visibles en la conducta, aunque no necesariamente de superficie en el sentido de que algo fundamental del sujeto podría quedar comprometido.
Las posiciones de los psicoanalistas en cuestiones de relación entre química y psicoanálisis, y sin entrar en detalles sobre las contribuciones de Freud y Lacan, suscitan una lectura prudente de las incidencias entre las respectivas areas. Contribuciones recientes vienen, no obstante, a reconocer en el psicoanalisis un valor pionero en relacion a algunas verificaciones de la ciencia experimental, aunque los campos estan claramente diferenciados.Las correlaciones en el campo teórico tampoco son indiferentes a como se considere el estatuto del psicoanálisis, ya que la problemática y las posiciones de Freud y de Lacan en cuanto a las relaciones del psicoanálisis con la teoría, y mas específicamente con la ciencia, son diferentes; variando en este ultimo en diferentes momentos de su obra.
Voy a considerar aquí psicoanálisis y psicofármacos apenas en cuanto tomados por diferentes discursos. Entiendo que los discursos prevalentes apuntan, en términos generales, a una comparación desde la óptica de la eficiencia de las terapéuticas. Una cuestión preliminar a toda correlación posible entre ambos resulta en primer lugar de que lo que puede ser considerado eficaz y terapéutico lo es de un modo diferente según cuál sea el discurso desde donde la cuestión se plantea. Con lo cual también resulta cuestionable la idea de eficacia, por apropiación, entendemos, de eficacia apenas en términos de eficiencia en los discursos contemporáneos prevalentes.(4).
En términos generales, entiendo que la clínica psiquiátrica contemporánea recibe directamente las presiones del mercado de la salud, ofreciendo entonces, especialmente en el caso de ansiolíticos y antidepresivos, una respuesta rápida y efectiva al malestar: la supresión inmediata del síntoma.Una de las vertientes de este modo de lucha contra el intolerable sufrimiento psíquico es, mas allá de su de su intención de curar, el dejar aparecer una clausura del sujeto del inconsciente. Al suprimir o incidir velozmente en el despliegue de la verdad del síntoma, el sujeto encontraría un tope para sus desdoblamientos. ¿Posible tal vez de revertir en el tiempo de una escucha?.
En cuanto a la clínica psicoanalítica, aunque tampoco al margen del mercado, cuenta con la disponibilidad del deseo del analista para promover la demanda de análisis, que esta en juego siempre, y presupone una ética. Esto no implica desconocer las variaciones y los limites del campo.
a.La idea de este trabajo,(5) es tomar los psicofármacos, en la medida que surgen como producto de la tecnología química, como forma especifica de Gestell química, termino de Heidegger traducido al espaZol como "estructura de emplazamiento", propia de la tecnología contemporánea (6).
b.Como tal, las Gestellen promueven el olvido de la dimensión insoslayable /estructural de la verdad en juego en el ser humano hablante, tal como la entiende el psicoanálisis desde Freud, y más específicamente como causa material, según Lacan, diferente de la que tiene en las perspectivas químicas y biológicas de la ciencia experimental contemporánea.
c. El psicoanálisis, emparentado con la ciencia, y más específicamente el llamado "dispositivo analítico" - constituido por psicoanalista y psicoanalizando -, podría considerarse como un tipo de Gestell, (7) pero diferenciado de ella por la existencia de la función "deseo del analista" y su condición de semblante de objeto "a" causa de deseo en la transferencia (8), implicado en la posibilidad de restituir al sujeto alcanzado por las tecnologías, químicas en este caso, el acceso a una verdad mas original, diferente de aquella formatada por la verdad en la ciencia experimental de nuestros tiempos.
d. El psicoanálisis reintroduce la dimensión y complejidad propias del humano que habla. Discurrir sobre los posibles efectos de la química en la subjetividad implicaría testimonios, por venir, tanto de analizantes como de analistas a la escucha de significantes. "Escuchar al Prozac", entre otros, es escuchar significantes, o sea, en este caso, poder escuchar lo que "Prozac" representa para ese sujeto. Quedaría también a la espera una clínica psicoanalítica abierta a los efectos de la química en lo real del cuerpo.
Lacan acuñó el termino : lathouses (lathousas/latusas), para referirse a aquellos "seres", productos contemporáneos de la ciencia y de la tecnología, objetos-nicho de olvido de la verdad freudiana. Este neologismo lacaniano conjuga :"lanthano", de "lathos" (ocultar, olvidar) y "aletheia" (verdad como desocultamiento). Encontramos aquí un punto en que tanto Lacan como Heidegger contribuyen a abordar estos impasses.
El psicoanalista es la lathousa principal entre las lathousas (9), afirma el primero, destacando así algo en común entre el psicoanalista y estos productos de la ciencia, pero solo para plantear diferencias, ya que el psicoanálisis actúa a nivel de la causa: pone la verdad en el lugar de la causa material, y la cuestión de la causalidad en psicoanalisis en un primer plano.
Lacan arriesga (10) un pronostico en que futuro del psicoanálisis depende-paradójicamente - de entrelazamientos sintomaticos con los productos de la tecnología.
Heidegger recurre a Holderlin, quien poetiza "en el peligro yace lo que nos salva", encontrándole así una vuelta a la cuestión del olvido de la verdad en nuestra época. Para Lacan, el síntoma no obstruye sino que seZala un camino, o mejor, es el camino mismo tomado en la dramática del malestar de la cultura, disponible para ser escuchado por aquel psicoanalista a la altura de las circunstancias, aquel que sepa reconocer las formas especificas que asume la subjetividad de sus contemporaneos.
El rescate de los efectos de sujeto, a partir de su segregación y hasta de su exclusión activa por los productos de la ciencia experimental, esta en el corazón de lo que el psicoanálisis se propone, comenzando por Freud. Sin que el mismo lo tuviese suficientemente claro, tal vez (11). Es en este punto donde localizamos los psicofármacos y sus efectos en el cuerpo del humano hablante, cuando la liquidación del síntoma en los manuales oficiales sobre las enfermedades mentales muestra la tendencia a acallar los efectos de sujeto.
No por casualidad la moda creciente de tatuajes, piercing y similares muestra el registro, la reaparición podríamos decir, a otro nivel, de ese momento y esa dimensión olvidada en que el sujeto expone/ se expone en el cuerpo, sus marcas de humanidad. Se escribe en el cuerpo lo que no se puede decir.
2.LA ESENCIA DE LA TÉCNICA
Heidegger propone el termino " Gestell" para designar la esencia de la técnica (12).Mi interes por Heidegger en este punto se debe a que el movimiento de su pensamiento nos remite al origen para re-lanzar y repensar una cuestión actual. La palabra alemana Gestell ha sido traducida al castellano como "estructura de emplazamiento"(13), evocativa de un montaje de piezas, de una implicacion de lugar y de tiempo (14). Emplazar es, según el diccionario (15), dar a alguien cierto tiempo y lugar, especialmente con el fin de dar una explicación sobre algo.Aquel filósofo nos explica que ha querido dar a esta palabra un sentido muy específico y diferente de la acepción habitual en alemán. Aproxima su intención a la de Platon aunque, segun dice, esta semejanza resulta tímida comparada con el salto producido en su momento por el filósofo griego, al denominar eidos, idea, a lo que constituye la esencia de lo sensible, de ningún modo accesible a los sentidos.
Por el lado de Lacan hay una conexión necesaria entre la época de la ciencia y el psicoanálisis. Este no podría haber surgido sin aquella. Sus sujetos están implicados: "El sujeto sobre el que operamos en psicoanálisis no puede ser sino el el sujeto de la ciencia", afirma Lacan en "La ciencia y la verdad".
La discusion de esta afirmación trata del estatuto mismo del psicoanálisis y no es ajena la cuestion que estamos tratando, pero optamos por dejarla fuera del propósito de este trabajo (discutir si el psicoanálisis es, o no es, una ciencia). Algunos autores consideran al dispositivo analitico como uma Gestell diferenciada constituida "entre" psicoanalista y psicoanalisante: el "dispositivo analítico", dispositivo transferencial.A diferencia de la ciencia, esta Gestell singular le da otro tratamiento al sujeto, cuyo tiempo y lugar escapan aquí a los ideales científico-técnicos [i(a)], por encontrarse el analista en el dispositivo, en el lugar de semblante de "a", objeto causa del deseo de un sujeto, que pasa a ocupar un lugar central.
¿Cómo se relacionarían estas especificaciones con los psicofármacos?.En el caso del sujeto en análisis medicado, o candidato a ser medicado con psicofármacos, habría dos estructuras de emplazamiento diferentes, donde cada una operaria otro modo de desocultamiento: cada una convocaría un modo del ser. Esta imbricación de estructuras de emplazamiento, convoca al sujeto medicado a sostener un funcionamiento - es lo que pide el discurso del amo-, con fundamentación en los mecanismos íntimos de los neurotransmisores- en el caso de los psicofármacos -, a partir de conocimientos cada vez más precisos y cuantificados de la ciencia farmacológica.
En esta nueva encrucijada de la tecnología química el psicoanalista tendría la opción ( y porque no, la oportunidad), de aguzar los oídos: "nuevos recursos técnicos" (los psicofármacos) contemporáneos para tratar "las patologías" pueden contribuir, por el olvido de su origen, a desconocer que "nuevas patologías" resultarian, precisamente, de tomar en cuenta la acción de estos nuevos recursos (tecnologías químicas) en el organismo (síndrome de pánico, etc. y otras enfermedades listadas en el DSM), con origen en la respuesta clínica al uso de psicofármacos, contribuyendo así a forjar / plasmar formas contemporáneas transmutadas de las antiguas neurosis que resultan en trastornos de la alimentación, fenómenos psicosomáticos, o comportamientos violentos por acting outs, cuando no efectos de genoma; en definitiva(16) algo a nuestra disposición.
Entiendo que al analista cabe situar, localizar, en esta red de fenómenos y/o nuevos síntomas, los significantes, o sea lo que es del sujeto en susingularidad, en un registro diferente de lo que llega como información registrada de diferentes tipos de ondas elecromagnéticas, o también como consecuencia del aumento o disminución de los neurotransmisores.
¡Localizar significantes en esta encrucijada de técnicas implica diferencias importantes de tratamiento y diferentes éticas!.
3. EFECTOS DE SUJETO Y EFECTOS DE LA TECNOLOGÍA QUÍMICA EN EL SUJETO
¿El psicofármaco, como tecnos, modo de desvelamiento del ser, segun Heidegger, es antagónico / diferente al Logos?. Heidegger afirma que la tecnología se caracteriza por el olvido de lo que la origino: "requerir perdiendo lazos". Para Heidegger: "la estructura de emplazamiento encubre no solo un modo de desocultar anterior, [un producir], sino que encubre el desocultar como tal, y con el, aquello por onde acontece el descubrimiento, es decir la verdad"... "La estructura del emplazamiento impide el aparecer e imperar de la verdad" "No existe una técnica demoníaca, al contrario, existe el misterio de su esencia" "La esencia de la técnica, como destino del desocultar, es el peligro"...
Así, la distinción entre la "esencia de la técnica", "diferente de la técnica" apunta a la cuestión de la verdad en juego. En esta medida, nos interesa precisar en que consistiría esta divergencia en el tratamiento de la verdad. ¿Es el efecto de.l psicofármaco como producto de la técnica actuante en la intimidad de los procesos químicos y biológicos del cuerpo, suplementario, indiferente o antagónico a los efectos de sujeto?
Entendemos que los efectos químicos, como tales, no entran, en el campo de la clínica psicoanalítica sino a través de significantes. Es en la medida que estos queden trabados o liberados que se podrá hacer algún tipo de correlación.
Podemos entender tambien a los antidepresivos Inhibidores Selectivos de Recaptación de Serotonina (ISRS) como una estructura de emplazamiento: los inhibidores selectivos de recaptación de serotonina, emplazan por bloqueo, a los receptores químicos de recaptación de la misma a nivel post-sináptico, provocando un aumento de niveles de serotonina como neurotransmisor, con los consiguientes efectos sobre el sistema nervioso y el organismo en general. Salvando las distancias, tomamos la analogía del ejemplo de la central hidroeléctrica en el río Rhin, mencionado por Heidegger: gracias a la tecnología se logra extraer el máximo de energía fluvial, para su posterior almacenamiento y distribución, y de un modo diferente al de las antiguas represas. El Rhin se convierte en " algo a nuestras ordenes".
Es a partir del aumento de serotonina por inhibición de la recaptación post-sináptica, ISRS, que se re-define el trastorno del estado de ánimo/humor: " Depresión".
Por otro lado, podríamos afirmar que los efectos de un fármaco no son, no podrían ser nunca, únicamente químicos. Por mínimos que sean, consideramos que desde el momento en que hay prescripción, están en
juego relaciones entre sujetos, o sea relaciones de deseo. El fármaco seZaliza un tipo de lazo de cierta complejidad (19). Se trata de que el individuo funcione, en principio, de acuerdo con el deseo del Otro, y con lo que promueven los ideales desde el lugar del Otro, I (A), cuando no del otro(pequeZo otro imaginario).
El psicoanalista, por su parte, se sitúa como objeto "a", semblante de objeto causa de deseo, con otro tipo de efectos, porque desde este lugar promueve diferencias con el deseo del Otro, o sea, apunta a la singularidad del sujeto, y no al cumplimiento de ideales sociales. Además de las incidencias en lo real
del cuerpo, se dan efectos en lo simbólico porque los fármacos no quedan al margen del lenguaje ni del discurso, así como tampoco son ajenos a lo imaginario del sujeto ni al imaginario social.
Algunos autores hablan de la inducción iatrogénica de una "estructura de dependencia química"(20) de drogas lícitas, donde se promociona el olvido de la dimensión del Otro, reforzando en cambio la relación con un otro no liberador. La droga no habla, ni escucha. " Escuchar al Prozac" apunta precisamente a la idea de que es el medicamento, y no el sujeto, quien habla.
Este cortocircuito promueve el olvido de la dimensión del hablante para desplazar el habla a nivel de la química, o mínimamente, de la fisiología. Metáfora forzada donde el excluido es el sujeto, por el olvido de aquella dimensión. Las píldoras de la felicidad ofrecidas a la psiquiatría llamada "biológica", por la ciencia experimental, conllevan la idea de que el fármaco seria, por si mismo, psicoterapéutico, por incidir principalmente en las conductas. Se descartan efectos sobre algún tipo de nivel de conflicto, o relacionados con estructuras de lenguaje. Esto implica una reducción, o hasta un desconocimiento de la dimensión de verdad de quien, de alguna manera, "se traga la píldora"!. De ahí su eficacia. Esto quiere decir que el fármaco, si consideramos al síntoma como expresión de una verdad singular, estaría actuando a un nivel esencial: allí mismo donde, por alguna razón, encuentra su expresión algo que no cabe en los moldes convencionales de una sociedad especifica o por alguna razon no es admisible para el sujeto. Tenemos entonces una intervención concebida a nivel del organismo, pero que excluye el conflicto o directamente lo suprime.
Aquí recurrimos nuevamente a Heidegger cuando lee en Heraclito los procesos de "narcosis del pensamiento"(21), en relación al ocultamiento de la verdad de la revelación subjetiva. Leemos aqui "narcosis del pensamiento" como narcosis del deseo (22).
4.EL SUJETO ADORMECIDO
Heidegger reflexiona sobre el pensamiento cuestionante de Heraclito, a traves de metáforas sobre el relámpago y la "tormenta del ser", poniendonos en la via de una cuestión relacionada al efecto tranquilizante de los psicofármacos. "Vemos este relámpago cuando nos encontramos con la tormenta del ser. Aún todo, hoy en día, traiciona el hecho de que solo nos movilizamos para desviar tormentas. Organizamos todos los medios a nuestro alcance para la transformación de nubes en lluvia, y dispersión de tormentas para calmarnos al enfrentarlas. Pero esta calma no es ninguna tranquilidad(23) . Es solo anestesia ; mas precisamente el adormecimiento del pensamiento [deseo] frente a la angustia".(24) .Curiosamente, el contexto en que emergen los psicofármacos (psicotrópicos) en la década del 50, su descubrimiento fue, literal y concretamente el de la anestesia quirúrgica: con la clorpromazina y el "cocktail lítico"(ampliactil, fenergan, demerol). Henri Laborit (1914-1995) descubre en la década del 50, el poder anestésico del largactil (clorpromazina), o anestesia potencializada. Empieza entonces la revolución psiquiátrica por los psicofármacos psicotropicos, permitiendo cambiar chalecos de fuerza por chalecos químicos. Lo que se inicia fue una era de liberación. ¿Es, al mismo tiempo, una era de anestesia, narcosis o adormecimiento del pensamiento [deseo] por el relevo, entendemos, del lenguaje por la química?.
Si "el síntoma es la medida en que cada uno goza de su inconsciente, en la medida en que el inconsciente lo determina", y la intervención del fármaco es sobre el goce, suprimir el síntoma es cancelar un modo de goce, perturbador para el sujeto y su entorno, pero accesible al saber, intentando reemplazarlo por otro que responde a formulas: el goce "químico". La relación con la expansión del uso de drogas llamadas ilícitas (toxicomanias) es inmediata (25).
¿Hasta donde tolerar entonces el síntoma?. Si Freud decía que no había que suprimirlos enseguida, tampoco alimentarlos, sino transformarlos activamente en algo mas productivo, en otro tipo de producción. Esta diferencia es fundamental, ya que no se trata de desconocer el avance de la ciencia psicofármacológica, sino de alertar sobre la promoción en escala masiva e indiscriminada de las drogas "psicoterapéuticas", como
solución prevalente o única ante el malestar o frente al dolor psíquico. Lo que se desconoce es la posibilidad
de otro tipo de lazo, realmente social, promotor de un tipo de producción-solución diferente de solucion del síntoma.
5. LA CUESTIÓN DE LA CAUSA
Estoy tomando aquí al psicofármaco como tecnología química para cuestionarlo en su esencia. Parto para ello de la afirmación de Heidegger : "La técnica. no es lo mismo que la esencia de la técnica".(26)
De no cuestionar la esencia de la técnica quedamos limitados, prisioneros de ella como medio o como instrumento, su acepción habitual (27). Afirmar su condición instrumental no es lo mismo que desocultar su esencia (28) Para Heidegger, lo instrumental es también una causa, aquello que tiene como consecuencia un efecto: "Allí donde se persiguen fines, se emplean medios, donde domina lo instrumental, allí prevalece la condición de causa, la causalidad". (Ursachlichkeit, Kausalitat). El filosofo se remonta a los orígenes del pensamiento griego para analizar las cuatro causas aristotélicas: material, formal, final y eficiente, preguntándose que es lo que las correlaciona como una unidad de cuatro: "Causa, casus, pertenece al verbo cadere, caer, y significa aquello que efectúa que algo, en el resultado, acaezca de este modo o de este otro". Acota, no obstante, a continuación: "Lo que nosotros llamamos causa, los romanos causa (Ursache), significaba para los griegos aition, aquello que es responsable de algo (verschuldet). Las cuatro causas son los cuatro modos que se pertenecen unos a otros - del ser responsable".(29)
Para Heidegger, la doctrina de Aristóteles de las cuatro causas no conoce la causa denominada con ese término, ni emplea un nombre griego correspondiente, acentuando en cambio la idea de compromiso o responsabilidad, y esto de un modo muy especifico (30):" Nosotros, tendemos muy fácilmente a comprender el compromiso moralmente, como falta, o lo interpretamos como un modo de actuar. En ambos casos obstruimos el camino para el sentido inicial de lo que mas tarde se llamo causalidad. En cuanto ese camino no se abre, tampoco conseguimos visualizar lo que es propiamente lo instrumental, que reside en lo que es causal"(31) .
En este punto, Heidegger introduce una distinción fundamental para lo que nos interesa, precisamente sobre este sentido inicial: "Desde la mirada sobre aquello que los griegos experienciaron en el ser responsable, en la aition, damos ahora a la palabra ocasionar un sentido mas amplio, de modo que esta palabra de nombre a la esencia de la causalidad pensada como la pensaron los griegos.(32)
En el significado corriente y más restringido de la palabra ocasionar, en cambio, esta significa solo algo así como estimular y desatar, y mienta una especie de causa secundaria dentro del todo de la causalidad". Entiendo aquí este " todo" de la causalidad como el conjunto de las cuatro causas (33).
Para Heidegger, causar es ocasionar en el sentido antiguo, (Veranlassen) anticipación y producción de una presencia, desocultación de la esencia, verdad. No es adecuación, adequatio res intelecto. La técnica resulta ser, entonces, un modo de desocultación!. " La tecne es un modo de la aletheia , tanto por el lado de la producción como por el lado de la poiesis (creación). Pero, sostiene Heidegger, la técnica moderna es desocultación exenta de poiesis. Es mas bien un desafío, una convocatoria a extraer, a exigir de la naturaleza llamar Gestell, estructura de emplazamiento, auxiliada por la ciencia exacta, que es exactamente el modo de la técnica. Allí donde Heidegger dice "compromiso" de las causas podemos hoy leer " implicación, subjetiva" o responsabilidad [(h)abilidad de responder], precisamente lo que se diluye en la llamada "tecnología psicoterapéutica" (los psicofármacos no cuestionados), ya que es a través del lenguaje donde se nos revela la verdad y la posibilidad de los efectos creativos, de poiesis.
Entiendo, a la luz de estas afirmaciones, que el psicofármaco estaría mas para el lado del "ocasionar" en el sentido actual y restringido a una condición de causa secundaria o estimulo, y no como causa en su sentido original, al modo griego antiguo: la exclusiva supresión del síntoma no permite el acceso a su origen ni al compromiso del sujeto implicado (responsabilidad). (34)
En este punto, como consecuencia del desvío de la noción de causalidad desde sus orígenes, hasta la contemporaneidad, el estimulo químico y farmacológico aparece teniendo efectos más espectaculares, en el sentido de un obrar sobre el organismo y la conducta, pero sin afectar la relación con la verdad.": en el régimen del pensar griego, y para el, todo lo que las épocas posteriores buscan en los griegos bajo la representación y el rotulo de " causalidad" no tiene absolutamente nada que ver con el actuar (obrar) y el efectuar."
Esta seria, a mi modo de ver, la gran torsión de la técnica científica que maximiza la causa eficiente en desmedro del conjunto de las cuatro causas que apuntan a la verdad. El psicoanálisis recupera la verdad como causa material y como causa final.
Es en tanto tecne, y más allá de su química, que los psicofármacos dejarían aparecer un esbozo de verdad en los efectos particulares, en lo que en medicina se llama " el caso particular", en lo que hace excepción a las estadísticas.
En psicoanálisis, y a partir del dispositivo analítico, la posición del analista como objeto causa de deseo nos remite a algo más radical que el "caso particular". Siguiendo a Lacan, si el psicoanalista "actúa a nivel de la causa", en el sentido griego antiguo, es que encarna lo que causa las asociaciones del analizando, la producción singular de sus significantes, sea o no evocados los psicofármacos como tales, vengan o no a aparecer en lo que se diga y más allá de los efectos biológicos o bioquímicos, cualquiera que estos sean. Es así como, entiendo, el sujeto podrá aparecer, ser escuchado. Esto no implica necesariamente que lo que diga sera igual que si prescindiera del psicofármaco. Pero, si que la presencia y el acto del analista los toma y relanza desde otro lugar y posición.
Desde una apertura a la esencia de los psicofármacos, como a la esencia de cualquier técnica nos "encontraremos inesperadamente establecidos en una exigencia liberadora"...según Heidegger. Serán o no liberadores del sujeto dependiendo del discurso en que estén tomados. Así..."¿ Que hago con mi brazo derecho si con él paso a ser el brazo derecho de otro?", se pregunta Lacan..Lo que esta en juego entonces no es solo la efectividad química y /o neurobiológica sino los efectos de discurso y aquello que lo causa.
La causa en psicoanálisis tampoco se confunde con la causa en la ciencia, que de por sí exigiría un desarrollo que excede los limites de este trabajo. No obstante considero de interés situar sus coordinadas. Según Jaques A. Miller, " las nociones de causa y ley son fácilmente confundidas". Siempre... "dentro de un marco científico consideramos que la relacion entre causa y efecto es fija"..."Eventualmente la investigación científica se propone formular leyes sobre la relación entre una causa dada y un efecto dado". En este contexto lo central en la idea de ley científica es: 1) una regularidad, que permite anticiparnos a la manifestación del efecto, desde el momento en que una causa Identificada este presente, y 2) una continuidad. Cuando la causa se inscribe en leyes, nos encontramos frente a una cadena de necesidad, determinismo" donde es posible decir que la misma causa produce el mismo efecto. Es decir, causa y efecto son homogéneos, del mismo orden. La continuidad hace con que una causa sea, al mismo tiempo, efecto de otra causa. Hay una cadena de necesidad, de determinismo. Sin embargo, es un determinismo donde es muy difícil situar con precisión la causa. Es decir, una causa con otro contenido que hace con que muchas veces no se logre saber, en la cadena de necesidad, donde ella comienza. Quienes introdujeron el discurso científicoen nuestra cultura, en el siglo XVII, tendía a poner una teoría de Dios como eslabón entre la ciencia y la religión"... " Desde el comienzo, el discurso científico estaba fundamentado precisamente en esta continuidad de causas y efectos"..."La causa en psicoanálisis "es una causa con otro contenido". Es una causa no inscripta en una ley de regularidad y continuidad, sino más bien una causa del tipo de la que preocupaba a David Hume, en el siglo XVIII, cuando mostró que el termino "causa", como separada, era primaria, no conceptual. Fue justamente este el punto que disparo el esfuerzo filosófico de Kant contra Hume. "En tal continuidad, no es posible nunca situar la causa como separada". En psicoanálisis, la causa, el concepto de causalidad, se plantea como diferente de legalidad, y siempre implica la noción de un eslabón perdido, es decir, de una discontinuidad. El sujeto del inconsciente, en Lacan, está comprometido en la estructura misma de la causalidad, como sujeto implicado en una falta.(35)
Por lo tanto, la causa, en psicoanálisis, a diferencia de la ciencia y de la religión, y más claramente desde Lacan, esta, para la cura psicoanalítica, del lado del analista, en el lugar de semblante de un objeto discursivo, objeto "a", causa de deseo. El encadenamiento de reacciones químicas disparada por un psicofármaco es algo de otro orden.
El analista, actuando a nivel de la causa, según Lacan (36) "se hace causa del deseo del analizante", agente de cambio de la posición del sujeto en el fantasma, de mudanzas en su relación con el inconsciente, a través del lenguaje. Esa causa es heterogénea, " extranjera" (37) a aquello que se integra en el discurso; la causa esta del lado de lo Real. Dado el lugar de objeto causa, ocupado por el analista, y no apenas encapsulado como objeto a tragar - aunque eventualmente también podría serlo-, sino por hacerse causa de deseo. El analizando no es para el objeto de deseo. El analista como causa de deseo abre una brecha a los significantes, singulares. Lacan afirma: "Es necesario decir que el deseo de ser el amo contradice el hecho mismo del psicoanalista: es que la causa del deseo se distingue de su objeto(38)... "la metonimia - objeto-deseo -, esta al alcance de otros, salvo del psicoanalista" (39) en la medida que el psicoanalista se sitúa en la abertura, en la hiancia del inconsciente(40). Es decir, no hay continuidad, hay discontinuidad, abertura.
El analista actúa mas bien a partir de un no saber. El saber funciona como saber inconsciente y desde otro lugar.
En la "causa- estimulo" neurobiológico el saber es mediado por el saber de la ciencia. La administración de psicofármacos es perfectamente compatible con su toma por el discurso del amo donde un agente (S1) se dirige al otro, paciente (S2) en posición de esclavo, permaneciendo el sujeto reprimido, y con "a", como producción, resto o desecho, objeto "instrumentalizado". Que pueda, a partir de allí, entrar en otro lugar y posición en el discurso psicoanalítico es otro giro de discurso, otra historia donde el psicoanalista tiene su responsabilidad. El psicoanálisis pone en cuestión al biologismo, explícitamente por la promoción de la relación al Otro, a través de lo imaginario del cuerpo, de la dialéctica del deseo y de su relación con el goce.
Ninguno de estos elementos entrará en juego si prevalece el biologismo como alternativa única.
12 Octubre 2003
Sara Elena Hassan
saraelenahassan@hotmail.com - sahara@apm.org.br - SaElHass@aol.com
Telefono en San Pablo, Brasil (011)38624527/ Telefono en Estados Unidos (305)8681834Notas
1 Considero a este trabajo, publicado en el site de los Estados Generales del Psicoanálisis, Mundial Rio 2003, ligeramente modificado ahora, efecto de varios intercambios paralelos: en San Pablo, Brasil, en el contexto de los Estados Generales del Psicoanálisis, tuvo como interlocutores frecuentes a Maria Cristina Magalhaes, Beatriz Aguirre, Felipe Lessa, Rubens Coura, y Renata Reis Favaro, en reuniones en las que participé durante mas de dos anos . Tomó su forma final en los EEUU, conversando con Mario Beira y por Email con colegas del Consejo de Redaccion de la revista virtual Acheronta. El lugar del psicoanálisis y de los psicofármacos en el imaginario social y en los discursos prevalenes en los EEUU, desde donde escribo en este momento, pasan a tomar otra dimensión e hizo para mí mas necesaria la publicación de estas reflexiones.
Los " Discursos", se refieren aquí a aquellos definidos por J.Lacan en el seminario XVII, " El revés del psicoanálisis", a fines de la década del 60. Discurso es lo que hace lazo social. Para Lacan los discursos son cuatro: discurso del amo, discurso de la histeria, discurso universitario y discurso analítico, último en aparecer, históricamente.
2 Termino vasto, entiendo, de Freud para referirse al deslizamiento de las modalidades de presentación de los síntomas según las épocas: "Algo semejante habremos de esperar de las enfermedades neuróticas de siglos pretéritos, a condición de hallarnos preparados a encontrarlas bajo rótulos distintos de los que designan a nuestras neurosis actuales. No deberemos asombrarnos de que las neurosis de estos tiempos antiguos aparezcan bajo vestiduras demonológicas, en tanto que las de nuestra época actual,antipsicológica -la puntuación es mía -, revisten aspectos hipocondríacos, mostrándose disfrazadas de enfermedades orgánicas". " Una neurosis demoníaca del siglo XVII", 1923.
3 "Des"-subjetivantes, construído por oposición a lo que promueve efectos subjetivos; significa aquí despojar o minimizar la subjetividad, en la medida que el "usuario" resultaría, de algún modo, usado, reducido a una posición pasiva o de objeto
4 Mas adelante en este texto se trata de la cuestión de la causa, y de como la causa eficiente, apenas una de las cuatro causas aristotélicas, toma un sentido diferente cuando separada y privilegiada en relación a las otras, solo en el sentido de un obrar eficaz.
5 Inspirada en los seminarios XVII, XX y de La Tercera de Lacan, y en la conferencia de Heidegger del 18 de noviembre de 1953 en Munich donde plantea que la esencia de la técnica es algo diferente de la técnica. Esta conferencia de Heidegger coincide con la fecha del primer seminario de los Escritos Técnicos de Freud por Lacan, en Paris!.
6 Definido como tal por M. Heidegger en " La pregunta por la técnica". En M. Heidegger. Conferencias y artículos. Ediciones del Serbal, Barcelona, 1994, pp. 9-37, traducción de Eustquio Barjau. Fuente: Internet, sitio mantenido por Horacio Potel.
7 En "Lacan: Heidegger", Jorge Aleman- Sergio Larriera, sostienen esta posibilidad. Ediciones del Cifrado, 1996, Argentina.
8 Lacan da el nombre de objeto "a" - o sea, formaliza con una letra - una posición y una función del psicoanalista. Es una de las contribuciones princeps de Lacan, emparentado con el objeto perdido de Freud. "a" nombra también al objeto como causa de deseo, al objeto como resto, como plus-de-goce, como objeto parcial.
9 En La Tercera. 1973.
10 Op. cit., 1973.
11 Como sabemos por los desarrollos, posteriores, de Lacan sobre el sujeto del inconsciente, el sujeto dividido, S barrado.
12 Heidegger, Martin. La pregunta por la técnica". En M. Heidegger. Conferencias y artículos. Ediciones del Serbal, Barcelona, 1994, pp. 9-37, traducción de Eustquio Barjau. Fuente: Internet, sitio mantenido por Horacio Potel. En ingles, The Question Concerning Technology, Harper & Row, 1977.
13 Entendemos que los campos semánticos no se recubren en los diferentes idiomas y que cada uno de ellos pone en evidencia acentos diferentes, que constan en nuestro original, y fueron suprimidos en esta versión por razones de espacio. En ingles "enframing", y "armacao" en portugués, por tomar solo algunos de los idiomas en las versiones del texto de Heidegger a nuestro alcance.
14 En M. Heidegger. Conferencias y artículos. Ediciones del Serbal, Barcelona, 1994, pp. 9-37, traducción de Eustquio Barjau. Fuente: Internet, sitio mantenido por Horacio Potel.
15 En el ámbito legal, emplazar al acusado es darle un plazo, o sea un tiempo determinado, en el cual el o ella tendrá que comparecer ante el tribunal para ejercer su defensa, entre otros. También significa poner algo en algún lugar, utilizado primeramente en el ámbito militar, para piezas de artillería, según el Diccionario de la Real Academia EspaZola, Vol. I.
16 Como el Rhin trastocado por la central hidroelectrica, transformado por la técnica, pasa a ser esencialmente algo diferente, otro Rhin."Es mas bien la corriente la que esta construida en la central. Ella es ahora lo que ahora es como corriente, a saber, suministradora de energía hidráulica, y lo es desde la esencia de la central".(17)/(18)
17 ." Er ist, was er jetzt als Strom ist, namlich Wasserdrucklieferant, aus dem Wessen des Kraftswerks", Heidegger, en op. cit. Edición bilingüe alemán- portugués, p. 58. Cadernos de traducao, USP.
18 En M. Heidegger. Conferencias y artículos. Ediciones del Serbal, Barcelona, 1994, pp. 9-37, traducción de Eustaquio Barjau.
19 Como el de Patricia Gherovici, sobre la diferente acogida del Prozac entre portorriqueZos y americanos de origen anglosajón.
20 Mas que una estructura de dependencia lo que se re-estructura es el goce.
21 Entendemos pensamiento como una de las funciones psíquicas, pero también como "un cuestionamiento por el pensamiento, en las vías del lenguaje"(Heidegger).
22 Cita de Jean Claude Milner, en "La obra clara", Pág. 8, Manantial : decir algo cuya existencia se impone a quien no lo pensó.
23 M. Beira, en "Logos, Hermeneutics and Psycho-analysis." Tesis de doctorado, Duquesne University, Pittsburgh. 19 Referencia a Heidegger en " What are the poets for?" y " Thinker as Poet" [Poetry, Language and Thought, 1971, y On the way to Language, 1982 ], p. 45 ."Once in the beginning of Western thinking, the essence of language flashed in the light of Being - once, when Heraclitus thought the Logos as his guiding word, so as to think in this word the being of Beings. But the lightining abruptly vanished. No one held onto its streak of light and the nearness of what it illuminated. We see this lightning when we station ourselves in the storm of Being. Yet everything today betrays the fact that we bestir ourselves only to drive storms away. We organize all available means of cloudseeding and storm dispersal in order to have calm in the face of the storm. But this calm is no tranquility. It is only anesthesia; more precisely, the narcotization of anxiety in the face of thinking . "Una vez en el comienzo del pensamiento occidental, la esencia de la lengua relampagueó a la luz del ser . Una vez, cuando Heráclito pensó el Logos como término rector, para pensar en este témino el ser del ente. Pero el rayo ya se extinguió. Nadie captó su radiación ni la proximidad de aquello que iluminaba", en traducción al castellano de G. Koop.
24 Traducimos aquí anxiety, no por ansiedad, sino por angustia porque pensamos que se aproxima mas a lo que Heidegger esta tratado de expresar. Ansiedad no como respuesta biológica sino implicando las incidencias del Logos en el cuerpo.
25 Joel Birman, en "Malestar na contemporaneidade", Rio de Janeiro, sostiene que drogas ilícitas y psicofármacos son dos caras de la misma moneda.
26 Siempre en "La pregunta por la técnica", traducida por Eustaquio Barjau.
27 " de lo que afirma que la técnica es medio o instrumento", siempre en la versión en castellano de "La pregunta por la técnica".
28 " para ser correcta, la constatación no necesita en absoluto desvelar en su esencia lo que esta adelante. Solo allí donde se da este desvelar acaece de un modo propio lo verdadero. Solo esto nos lleva a una relación libre con aquello que, desde su esencia, nos concierne".
29 En la traducción brasilera, bilingüe, directamente del alemán al portugués, se aclara que verschuldet, derivado de Schuld no es culpa en sentido moral o legal, sino más bien lo que compromete, compromiso, "destino".
30 Para seguir mas de cerca el hilo del pensamiento de Heidegger remito al lector al texto sobre la técnica, ya mencionado.
31 Puntuación a cargo de la autora del presente texto.
32 En la traducción espaZola, desaparecen las comillas del "ver-an-lassen" y " Veranlassung", ocasionar, ocasionamiento.
33 " Los cuatro modos del ser responsable llevan a algo a aparecer. Lo dejan venir a darse en la presencia. Lo sueltan en esta dirección, y de este modo, le da la ocasión a que venga, a saber, a su acabado advenimiento. El ser responsable tiene el rasgo fundamental de dejar venir, el ser responsable es el ocasionar." Cita de Heidegger en "La pregunta por la técnica".
34 Michel Sauval: " El psicofarmaco no es una causa", en archivos del Consejo de Redaccion de Acheronta, 2001.
35 Jacques-Alain Miller: To Interpret the Cause: From Freud to Lacan, en Newsletter of the Freudian Field, Vol 3, Numbers 1&2, 1989. La traducción desde el inglés de este fragmento es responsabilidad de la autora quien, en fecha posterior a la redacción de este texto supo que existía una edición en castellano del mismo.
36 Jacques Lacan, Seminario del acto analítico, 17/12/69, inédito.
37 Jacques Lacan en 17/2/1969, Seminario XVII
38 en su estilo: " lo que testimonia la metonimia del lingüista" .
39 Radiofonía, pagina 34, primera parte. Anagrama.
40 Radiofonía, pagina 34, primera parte. Anagrama.