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"En otros términos, un analista ¿ puede, (...), comportarse como un imbécil?
Es muy importante como pregunta. ¿Cómo se juzga lo que califico de imbecilidad?.
Eso tiene seguramente un sentido también en el discurso analítico." 1("Entre d´autres termes, un analyste, peut-il,(...), se comporter comme un embécil?
C´est très importante comme question. Comment se juge ce que je califie de l´imbecillité?")Desplegando la pregunta que a repetición nos encuentra, intento un recorrido que trame respuestas. Trama concebida siguiendo la vía abierta junto a la pregunta con el movimiento de sus términos. Compartimos la pregunta con Lacan, volvemos a Freud en el camino que busca respuestas.
Para comenzar
La imbecilidad: concebida con su sostén en lo imaginario, no sería posible sin la letra: la escritura, el efecto de la lengua escrita. "Intelligieri", - inteligencia- se deriva de él inter.-lligieri: leer entre líneas.
El sentido, en la intersección de lo simbólico y lo imaginario; el sentido: la imbecilidad, dice Lacan como si fuese posible sustituirlos. ¿El mismo goce? real, fijo, repitiéndose en una y mil vueltas -que podrían ser interminables?- 2, siempre con el mismo texto.
Función del aparato psíquico Inercia, repetición, mente organizada, organismo, órgano psíquico.
Cifrado : simbolización en una imagen 3 (símbolo: letra-ideograma) "codicilo", letra grabada en la nuca, cifra de lo real; simbolización imaginaria de lo real que como los números complejos se repite en series periódicas, cada tres generaciones con el texto del mito individual de cada quien. Combinación de alternancias que se invierten transformándose en una nueva versión de lo mismo de generación en generación; padeciéndolo, gozando de ello, con pasión, con pasión por el significante, pasivamente, con-padeciendo-se con las letras sinrazón. La letra que propiamente dicha se transforma en dicha propia, salando la vida, que queda perpleja en presencia de su agujero.
Escritura de la que se goza labrada en imágenes, sustancia de la lengua con la que se hacen diques, nos corre corriente por la espalda, soñamos el sexo y nos late el cuerpo, hacemos el sexo y soñamos su cuerpo.
"Tocamos la carne y abrazamos quimeras", -decía Dalí-, es tan cierto como que "en todo encuentro amoroso hay un participante invisible: la imaginación" 4,
...Y de ella nacen nuestros hijos... cuando llevan nuestro nombre.
I - La Imbecilidad
¿Cómo dar cuenta de ella?
Seguiremos en esta primera parte la primera clase del Seminario R.S.I, donde Lacan pone a trabajar la imbecilidad articulada a los registros.
Puesta en equivalencia con la Debilidad Mental es ubicada por Lacan en el registro del sentido prácticamente en equivalencia con él.
Podemos decir que en su punto de partida, los tres registros: R.S.I (Real-Simbólico e Imaginario) vehiculizan un sentido, del mismo modo que,-en su pendiente pasible de homogeneidad-, en tanto hecho de tres dimensiones, el nudo es Imaginario como el espacio.
" nada más que pronunciar el término Imaginario, hay algo que demuestra que el ser hablante se encuentra consagrado a la Debilidad mental"
Debilidad mental, producto- respuesta de lo imaginario, que encuentra su referencia en el cuerpo en tanto punto de partida de aquél. "Todo lo que de él se represente no puede sino ser el reflejo del organismo que él es". Organismo que, como su definición implica, está hecho de órganos; cada uno de los cuales posee funciones fijas y específicas; como es el caso de cualquier aparato (auto computadora...)
No todo cuerpo está vivo.
Lo que atestigua mejor su vida es la mente : "ce mens", vía por la que justamente se introduce la dimensión de la debilidad mental. No sólo por que lo atestigüe, sino porque la dimensión de la debilidad se introduce con lalengua,- que podemos tomar como concepto y articularlo a la letra- y no con cualquiera, añade Lacan, sino con la latina. En ella el término ....vouÇ griego, que hacia alusión a un saber supuesto para lo Real – 5 ya no está, en su lugar está intelligieri
Debilidad mental pertenece como concepto a la misma lengua que acuña intelligiere, leer entre líneas –Inter. lligiere, -casi parece su anamorfosis-; sin el cual, no habría imbecilidad.
"Es en este efecto de escritura de lo simbólico que sostiene el efecto de sentido, dicho de otro modo de imbecilidad, aquel del que testimonian hasta nuestros días todos los sistemas dichos de la naturaleza. Sin el lenguaje, no podría llegarnos la mínima suposición de esta imbecilidad, que es también por lo que el soporte que es el cuerpo nos testimonia (...), nos testimonia de estar-ser vivos". 6
Es esta cita la que entiendo es pasible de ser despejada con el "Proyecto de una psicología para neurólogos" en tanto que en él Freud, intenta dar cuenta precisamente del funcionamiento del aparato psíquico.
Entramos en él entonces con la imbecilidad cernida en términos de efecto de sentido que no es sin la escritura, soportada por el cuerpo.
Imbecilidad que en la lengua nace junto a la lectura entre líneas, etimología de la que literalmente deriva también su opuesto: la inteligencia
Imbecilidad, sentido, registro Imaginario. = no sin el cuerpo hecho de órganos con funciones fijas, que funcionan automáticamente; repetición 7 que no es sin la letra, inscripción, texto cuyo sentido es entre líneas. Líneas que si leemos textualmente lo deshacen, lo transforman. Cuerpo de la letra anudando goce-sentido, padecido como imbecilidad:
Proyecto de una psicología para neurólogos.
II - La letra en el Icc. O la causalidad desde Freud.
¿ Porque el Proyecto?
Es allí donde Freud despliega el concepto de letra: inscripción de huellas de lo real en símbolos, huellas que son imágenes.
Cada complejo Icc, consta de un conjunto de letras –griegas en el dibujo de Freud- que funcionan como ideogramas: cada una es un haz de imágenes 8plasmadas, grabadas, escritas por la impresión que dejó una escena real: su intensidad depende de eso: del valor de esa escena, la carga: quantum de afecto, Qn, energía psíquica... Freud no sabe cómo llamarlo: libido. Todos sabemos -si nos dedicamos diariamente a la clínica- de lo real de la letra para cada sujeto, fija en su texto, escrita.
A la letra del complejo, a su texto remite el síntoma; el texto de la inhibición cuando el cuerpo es mudo; la trampa de la repetición siempre dando la misma vuelta; en el hombre de las ratas siempre el mismo complejo paterno, su texto conectado en la eclosión, bifurcado en sus síntomas, argumentando su delirio nocturno, constituyendo el conjunto de redes que amarraban su vida.
Freud llama Aparato Psíquico, al órgano por el que circula la libido. Concebido de tres dimensiones, instancias: el aparato consta de: superficie, w receptores, Sistema Pc- Cc; conexiones j, que pueden ser leídas Pre Cc (palabras, inscripciones palabra, el discurso común dirá Lacan en el Seminario 9) con el Sistema Icc: Y, en el que se inscriben las huellas, el único capaz de memoria; conectado con w, que no es sino una pantalla cuyo filtro está hecho de las conexiones con Y, cargadas, pre-catectizas (catexia, algo así como el quantum de carga).
Carga, libido, afectos 9, corrientes reales en el cuerpo, de las que la angustia es la única que no engaña, que no se desplaza fijándose en alguna contigüidad; real en el cuerpo, goce, cargas 10. Fuerzas que estrangulan la garganta, aceleran los latidos, oprimen el pecho, humedecen y hasta inundan los ojos. También nos hacen transpirar y poner colorados. 11
Polos de atracción que determinan aquello que de la corriente circulante Q, se fijará en Qn, energía psíquica, que circula por el sistema según leyes de atracción determinadas por las cargas previas inscriptas. w constituye el filtro la pantalla que de la Pc sólo deja pasar aquello que se conecte con las inscripciones existentes en Y.
Al decir de la poeta Anais Nin, "No vemos el mundo tal cual es, lo vemos tal cual somos".
Todo el sistema, como todo sistema, tiende a la inercia, es decir a la repetición constante para mantener la carga en el sistema. Así funcionan los aparatos, organismos con vida o no, los cuerpos constituidos de órganos con funciones específicas.
El mecanismo del aparato está sostenido en la Identidad, la búsqueda es de la Identidad de percepción, de la que "nuestra molestia por la contradicción y búsqueda de eliminación a nivel del pensamiento, es su reflejo" 12
El pensamiento no constituye más que la serie de rodeos, que bifurcan los caminos a partir de las diferencias encontradas junto a alguna semejanza, sólo para llegar a la identidad completa eliminando la diferencia.
"La búsqueda del objeto consiste en volver a encontrarlo", no es otra que la definición del Principio de realidad .
El Yo mismo está hecho de Identificaciones, que no son otras que la precipitación de las huellas del objeto y los signos de su amor 13, del camino trazado por la demanda en la relación con el Otro, que sustituye al objeto de la satisfacción en tanto está unido a él, en su presencia y en su ausencia, en su aparición y desaparición. Elevamiento 14 de la tensión, descarga de la tensión, siempre del mismo modo, grabando su huella con las marcas de la relación al Otro.
La intensidad, determinante del surco está dada de dos modos:
- la repetición por acumulación del quantum
- o mayor cantidad de Qn, que siempre conlleva dolor –dice Freud-, por elevar la tensión en el sistema que tiende a la estabilidad-inercia- interna 15
El dolor deja así huellas indelebles 16.
La búsqueda de la Identidad, lo es de la Identidad de percepción, ¿con qué?, con la vivencia de satisfacción, que connota al objeto que se trata de volver a encontrar.
La huella indeleble por excelencia es esta: la vivencia de satisfacción, in-tensa.
No sólo el dolor es indeleble, la modalidad de acumulación de la excitación interna y su descarga satisfactoria o vuelta a la ausencia de tensión, constituyen el circuito grabado a partir del cual se diferencia el Yo: se imprimen sus marcas inconscientes que constituyen la identidad de cada quien. Nunca sin el Otro, al igual que la vivencia de satisfacción. Siempre otra.
Ambas son tratadas en un apartado: La vivencia de satisfacción y la vivencia de dolor. Ambas constituyen las cargas de las huellas, ambas dejan "facilitaciones permanentes", surcos, dibujan un recorrido, un movimiento, un trazo.
La vivencia de satisfacción
El aumento de la tensión endógena – la repleción del sistema- llama, demanda la descarga; la primera vía es motriz: el grito, la inervación vascular 17, a pesar de la descarga motriz el aumento de la tensión continua ya que es una modificación del mundo externo la que aportará su detención: la acción específica, que en razón de la prematuración, de la indefensión primordial en que nacemos los mamíferos, no es sin el Otro: "Así esta vía de descarga adquiere una importantísima función en la comunicación y la indefensión original del ser humano conviértese así en la fuente primordial de todas las motivaciones morales" 18
Es esta relación con el Otro, el circuito de la demanda lo que queda plasmado en la vivencia de satisfacción. Es "la totalidad del proceso lo que tiene las más decisivas consecuencias para el desarrollo funcional del individuo". 19 20
Se efectúa una modificación del Sist. Y, una inscripción al tiempo que se efectúa una descarga permanente que elimina la tensión del Sist., la urgencia que generó displacer. Se produce entonces una catectización , se invisten, cargan las imágenes correspondientes a la percepción del obj. y de los movimientos-dispositivos reflejos que siguieron a la acción específica: es decir la noticia de la descarga lograda. Se produce así entre, el conjunto de las catexias, investimientos, marcas de la satisfacción lograda y las catexias existentes a partir de las fuentes endógenas de la tensión , una facilitación permanente 21
Al reestablecerse el estado de urgencia, la tensión, es reinvestida la facilitación; la carga pasa a los recuerdos, a las huellas de la vivencia de satisfacción, en su conjunto, reactivándolos.
Freud aquí supone la alucinación misma y la frustración si condice a la descarga (lo que habilitará la diferencia entre la huella en Y y la Pc.)
La vivencia de dolor tiene las mismas condiciones que la vivencia de satisfacción: el aumento de Qn, de la tensión en el aparato por el ingreso de cantidades que rompen con su fuerza el umbral establecido por la pantalla . El dolor como experiencia modifica también en Y el dibujo, para llamarlo de un modo concreto; su intensidad, en tanto eleva la cantidad de... Qn (energía, energía psíquica, libido, carga de..., corriente), su intensidad, el quantum, es lo que se graba con un signo de w, Ccc, (+,-), en la medida en que suscita su descarga y, por simultaneidad, se graban la imagen del objeto –hostil en este caso-y la forma de la descarga; quedando ambas así ligadas, constituyéndose una facilitación.
Es indudable que el dolor manifiesta una cualidad especial que es paralela al displacer. 22
Si la huella es catectizada de nuevo, por Ej. a causa de una percepción, surge un estado que no es de dolor , pero que guarda con él cierta semejanza –es su reproducción, su marca. Este estado, su marca, incluye el displacer y la tendencia a la descarga de la vivencia de dolor. Dado que el displacer incluye un aumento de la cantidad aparece la pregunta, de dónde proviene esa cantidad, con lo que es necesario admitir, dice Freud, que los recuerdos poseen afectos. En la vivencia de dolor es la cantidad exterior la que eleva el nivel de cantidad en Y, no la tensión endógena. En su reproducción, la única cantidad que se le agrega es la que catectiza , inviste, aviva, el recuerdo, que es de la índole de cualquier otra percepción y que no puede resultar de ella un aumento general de cantidad.
Nos vemos obligados a admitir –dice Freud- que la catectización de los recuerdos desencadena displacer en el interior del cuerpo, es decir, hace surgir nuevas cantidades de displacer – 23
Freud propone aquí -dando cuenta de la carga de la letra, de su sustancia gozante- las "neuronas llave", que serian neuronas motrices "secretoras" activadas por la marca primera, por el recuerdo, que al ser excitadas causan en el interior del cuerpo la generación de algo que actúa como estímulo sobre las vías de conducción facilitadas hacia -hacia la impresión simultánea, es decir influyen sobre la producción de cantidades endógenas, en consecuencia: no descargan cantidad sino que la aportan por vías indirectas. A estas neuronas secretoras las llamaremos "neuronas llave": neuronas secretoras de afecto conectadas con las letras (a,b,g,d), huellas, complejos; que en su descarga aportan, porque es una carga endógena, energía endógena.
Esta hipótesis tan desconcertante, prosigue Freud, pero indispensable, es confirmada en cierta manera por lo que ocurre en la liberación de impulsos sexuales. 24
Del mismo modo queda corroborada la carga posible amalgamada a las imágenes mismas en la medida en que es posible despertar de un sueño con un orgasmo.
Freud también señalará que el dolor puede dejar tras de sí facilitaciones extraordinariamente grandes, particularmente abundantes y extensas; que aún una pequeña dosis del recuerdo hostil puede desencadenar liberaciones de displacer extraordinariamente grandes.
Como en el caso de la simultaneidad y su impresión en cuanto a intensidad, del mismo modo con el dolor, en tanto la facilitación depende de la magnitud alcanzada; es dable calcular que la repetición tiene mucha menor fuerza que la dosis directa, esto es que 3Qn, no es lo mismo que Qn por tres en cuanto a su efecto facilitante. Entramos en un problema. La vivencia de satisfacción se imprime por repetición, la vivencia de dolor por ingreso masivo de Q del mundo exterior.
De lo que debemos extraer nuestras propias conclusiones.
Finalmente, Freud concluirá que tanto el afecto- producido por un desprendimiento repentino, como los estados desiderativos, en el deseo producido por sumación, dejan tras de sí motivaciones de tipo compulsivo a favor de dicho pasaje: el habilitado por la vivencia de satisfacción y por la vivencia de dolor: ambos determinantes del pasaje en Y- constituyendo esta determinación en Y el umbral de la pantalla del Sistema Pc-Ccc-
III - Del origen de la letra, símbolo de una imagen de lo real, a la constitución del Icc: SIR, su anudamiento, simbolización imaginaria de lo real, su amarre del mundo. 25
Platón, en su Fedro, cuenta una historia muy interesante acerca del origen de la escritura. Fue descubierta por un Dios, en el antiguo Egipto, junto al número y al cálculo, a la geometría, la astronomía, el juego de damas y los dados; junto a ellos regala las letras al faraón. (Thamus, al que llamaban Ammón). Cuando el dios expone sus artes al Faraón que visita, le dice que son para ser entregadas a los egipcios. Despliega entonces el dios las ventajas que cada una tendría para su pueblo y que el faraón alababa o reprobaba en cada ocasión.
"Muchas fueron las observaciones que en uno u otro sentido según se cuenta hizo Thamus a Theuth (...) Pero una vez que hubo llegado a la escritura, dijo Theuth: este conocimiento, OH rey, hará más sabios a los egipcios y aumentará su memoria. Pues se ha inventado como un remedio de la sabiduría y la memoria" Y aquél replicó: "Theuth, excelso inventor de artes, unos son capaces de dar existencia a los inventos del arte, y otros de discernir en qué medida son ventajosos o perjudiciales para quienes van a hacer uso de ellos. Y ahora tú, como padre que eres de las letras, dijiste por cariño a ellas el efecto contrario al que producen. Pues este invento dará origen en las almas de quienes lo aprendan al olvido, por descuido del cultivo de la memoria, ya que los hombres por culpa de su confianza en la escritura serán atraídos al recuerdo desde afuera, por unos caracteres ajenos a ellos, no desde dentro, por su propio esfuerzo. Así que no es un remedio para la memoria, sino para suscitar el recuerdo, tu invento. Apariencia de sabiduría y no sabiduría verdadera procuras a tus discípulos. Pues habiendo oído hablar de muchas cosas sin instrucción, darán la impresión de conocer muchas cosas, a pesar de ser en su mayoría unos perfectos ignorantes, y serán fastidiosos de tratar al haberse convertido, en vez de sabios, en hombres con la presunción de serlo." Platón, Fedro 274c-275b.
Escritura que según el faraón posibilita el olvido, no remedia la memoria, suscita el recuerdo desde fuera.
La letra en el Icc., el rasgo, la huella, el surco, trazo.
La letra, Lacan dice posterior a la lectura; históricamente, posterior a la cuenta.
Luego de hacer la cuenta leímos, luego de leer escribimos, primero los números, luego las letras.
Extraídas del dibujo primero de lo real, que buscaba atraer lo representado, de su abstracción, se plasman como signos de un sonido, que se combinó con otros para escribir, plasmar las palabras, las ideas, las escenas, los nombres: ideogramas: dibujos de ideas, de complejos de palabras, de escenas. Así se lee el Icc., "Estructurado como un lenguaje".; como los jeroglíficos dice Freud, hay que leer los sueños, los síntomas, los chistes; las formaciones del Icc., cifrado.
La letra, sustancia de la lengua circula por ellas, por sus surcos, conectando, lo visible. Lo invisible no es otra cosa que la falta de surco que habilite su acceso a la Cc.
Volviendo a la imbecilidad, en un movimiento que sigue en su curso los carriles de la demanda, Lacan dice no pretender salir de ella al entrar en su anécdota. A la salida, volviendo a los nudos agrega que si un psicoanálisis aporta algo, es necesario pensar qué se pierde en otra parte. "Qué podremos perder, por otra parte si vengo de decir que todos los sistemas de la naturaleza hasta aquí surgidos están marcados por la debilidad mental, qué se puede esperar! Nos queda de todos modos, esos aparatos-pivotes de los que la manipulación puede permitirnos dar cuenta, a nosotros analistas, de nuestra propia operación" 26
En el seminario 9, en busca del trazo, la marca, la identificación; el nombre propio; la cuestión se introduce como la atadura del lenguaje a lo real; la necesidad de concebir la lengua como un objeto en sí mismo, por fuera de la Cc. de todo sujeto, como un campo con leyes propias, estableciendo la unión de su funcionamiento con la marca que lo porta.
La escritura revela en su historia una serie de inversiones en espiral desde los primeros trazos simbolizando, atrapando algo de lo real; hasta las letras luego determinándolo, en un movimiento inverso en el que la realidad es el recorte legible del mundo, no sólo para cada quien, sino para cada cultura.
Es por la inversión de esa relación de lectura del signo que puede nacer la escritura en tanto sirve para connotar la fonematización. Es a partir de la independencia de esa amalgama entre el sonido y su trazo, que una realidad se independiza, con vida propia, guardando el recuerdo del objeto junto a su ausencia, huella cuyo rastro connotará lo real de realidad, creando en su combinatoria posibles existencias irreales.
Aparece en este momento, justamente que el nombre propio, en tanto enraizamiento del sujeto a lo que está en la lengua presto a recibir esta información del trazo, porta el trazo de modo que de un lenguaje a otro se traslada idéntico, no se traduce; la marca lo connota uno; vacía de sentido, sin significado de una lengua a otra; uno, el nombre como el palote...
Este trazo, letra, que se traslada sin traducción, singular a cada quien, nos interroga sobre lo que es necesario suponer en el origen del Icc., ese algo que en tanto el sujeto habla, no puede sino avanzar siempre más adelante en la cadena del desenrolle de sus enunciados, dirigiéndose hacia ellos al tiempo que en la enunciación se elide el nombre de lo que él es como sujeto. "En el acto de enunciación hay esta nominación latente, que es concebible como siendo el primer nudo, como significante de lo que va a organizarse como cadena giratoria, ese centro, ese corazón parlante del sujeto que llamamos Icc." (sem.9 pag 8, clase cit.)
Qué es esta nominación latente sino el Yo Icc. propuesto por Freud en el Proyecto, como precipitación de las catexias retenidas de la vivencia de satisfacción y dolor, deletreadas, huellas del circuito de la demanda que afirma al sujeto en una marca que lo localiza en el ensamble de insignias desde el que hablará sin saber su nombre, repitiéndolo sin cesar 27. Habla sin saber su nombre, escrito en las huellas con las que lee el mundo, creyendo que es el mundo lo que ve.
Lacan recurre a la topología intentando dar cuenta del pasaje, de la interferencia entre Icc. y PreCc. ¿Cómo puede haber tal franqueamiento de "couches"; (: disposición de elementos en zonas superpuestas/ en geología: conj. de elementos comprendidos entre dos planos, casi paralelos/ en física: nivel que caracteriza el estado de un cierto número de electrones ligados a un nudo), de umbrales ( que es el límite, entrada de una casa; pero también en fisiología: es el nivel de intensidad mínimo de un estímulo fuera del cual una excitación no es percibida –umbral de audibilidad-.)
¿Cambio de investidura o doble inscripción? Se interroga Lacan siguiendo el planteo de Laplanche y Pontalis.
El PreCc, el discurso común, está fuera del sujeto del Icc., ese fuera que une, liga nuestros pensamientos más íntimos.
El discurso común rueda por las calles, el lenguaje en sustancia, que hoy podemos imprimir en cintas magnéticas, discos... El PreCc. está en lo real, es la respuesta de Lacan, constituye un Myscelium, un reticulado entretejido en los intervalos de lo real, constituye un juego de signos ya existente, un discurso en el que el Icc. estructurado como un lenguaje. se encuentra en casa.
El orden Icc.–PreCc, arribará a la Cc. Debemos concebir que eso real que circula por el mundo, el discurso común es algo que tenemos para leer, estructurado del mismo modo, la realidad vista por "nuestros ojos hechos a los signos del cambista" .
Es en el PreCc., en el discurso común que habita la cifra Icc. a ser descifrada. Hechos de lo mismo, en distinto nivel, dice Lacan: proponiendo al Icc. constituido en el nivel más radical de la emergencia del acto de enunciación, irradiándose en todos los enunciados la fuerza del nudo primero.
IV - Un Caso
El discurso común, la vida actual de cada quien es leída con el idioma, con lalengua dicha materna, con los trazos del Otro que nos marca, nos surca, abre los canales por los que el mundo ingresa ...y egresa.
Alguien dedicado a los aparatos –mecánico- consulta por tener constantemente problemas con sus jefes. Ha debido ya cambiar siete veces de taller por volverse intolerable hasta la voz a lo lejos,... la tensión va en aumento hasta hacerse insoportable. Siempre es la misma cuestión: "lo están probando, si es un idiota", lo están gozando a ver si se equivoca. Él se encuentra entonces en la imposibilidad de decir que no a toda demanda, incluídas las imposibles, porque de otro modo quedaría como un idiota. Así, termina haciéndose cargo de problemas irremontables, dando la cara por faltas varias, cubriendo diversas situaciones más o menos insalvables; lo que se vuelve una constante que conduce a la renuncia como única salida. Finalmente, Lo toman por idiota.
Muertos sus padres, fue criado por sus abuelos. Recuerda, conecta en una sesión, un juego que duró toda la pubertad, en casa de sus abuelos. Él era el encargado de los gansos, de darles de comer. Él siempre fue el chistoso del grupo, el de las bromas pesadas... Con los gansos, jugaba todos los días a probar cuán estúpidos son –y lo cuenta riendo a carcajadas-, disponía su comida de modo que ellos la seguían, seguían la carnada hasta encontrarse, siempre en el mismo lugar, desde un chorro de agua con la manguera, o con los impactos de la onda que lanzaba, hasta fuego cierta vez que llegó más lejos. El juego de todos los días fue llamado "la fábula de los gansos".
Era una "máquina de torturar" a los gansos.
Marca primera que aparece última: todas las tardes, siendo él muy pequeño su padre lo llamaba para apretarlo-marearlo, "la máquina de torturar", para que llorando se duerma: no sé, era el modo en que me dormían la siesta. Su padre le decía que iban a hacer el avioncito, era con lo que él todas las tardes mordía el anzuelo de la "máquina de torturar". Entonces su pregunta es "¿Era idiota yo?", si todos los días me hacía lo mismo porqué iba?.
Letra, huella con la que lee su realidad cotidiana. Conciente siempre de lo mismo, todos los jefes estaban connotados del mismo rasgo, siempre el mismo índice de realidad que lo dejaba parado en la misma pregunta... Qué soy?
...De la que no dejaba de anticiparse siempre la misma respuesta
V - Para concluir
La Conciencia es la superficie por donde algo que está en el corazón del sujeto recibe desde fuera sus propios pensamientos. La conciencia está allí para que el Icc. bien rechace lo que le viene del Pre-Cc o elija allí del modo más estrecho y restringido aquello que él necesita para sus oficios..... Qué es... que es el modo en que la repetición mantiene la estabilidad del sistema en la búsqueda de la identidad.
¿Cómo salir de la maquinaria? ¿Somos todos idiotas? ¿Estamos condenados a la imbecilidad?
La posibilidad de leer las huellas señala ya otro lugar.
Notas
1 J. Lacan, R.S.I, clase del 19 DE NOVIEMBRE DE 1974. Traducción y subrayado propios.
2 Tiene límite la repetición?
3 También son acústicas las imágenes
4 Octavio Paz
5 termino que además de incluir inteligencia, sagacidad, sensatez, es contiguo de otro, voue que incluye: mente, espíritu, memoria, inteligencia: es decir todos los registros de ese mens-,
6 "C´est dans cet effet d´écriture du Symbolyque que tient l´effet de sens, autrement dit d´imbécillité, celui dont témoignent jusqu´à ce jour tous les systèmes dits de la nature .Sans le langage, pas le moindre soupÇon ne pourrait nous venir de cette imbécillité, qui est aussi ce par quoi le support qu´ est le corps nous temoigne, (...), nous temoigne d´être vivant".J.Lacan, ob.cit. Clase del 10 de dic. De 1974
7 ¿Acaso no es la imbecilidad lo que se repite sin parar?
8 las imágenes también son acústicas.
9 excitación-dolor psíquico, podrían ser sus nombres en términos de afecto
10 + y -
11 lo que también puede ser llamado ataque de pánico y medicado con Rivotril.
12 S.Freud. "Proyecto de una psicología para neurólogos". O.C.Ed. Biblioteca Nueva. Madrid. 1968
13 O no, del odio o la indiferencia podríamos agregar.
14 elevamiento: éxtais, arrobamiento. Dicc. Sopena. Barcelona
15 Lo que nunca le cerró con esta lógica a Freud, fue el acto sexual ¿porqué al elevarse la tensión no se experimenta dolor? Aunque el placer tenga su clímax junto a la descarga de su intensidad
16 siguiendo la observación anterior, deberíamos decir –no sin Freud- que el placer in-tenso también. Ir a : "Pulsiones y sus destinos". S. Freud.
17 Causa de: picos hipertensivos, ataques cardíacos, jaquecas, isquemias y todo tipo de irrupciones en el cuerpo inherentes al aumento de la presión endógena.
18 Deberíamos aquí abrir un capítulo aparte para hacer lugar a la investigación de Ivonne Bordelois acerca de la Etimología de las pasiones, editada por libros del Zorzal, enlazando las cargas a las letras.
19 S.Freud. "Proyecto de una psicología para neurólogos" Pág.910. O.C.Ed. Biblioteca Nueva. Madrid. 1968
20 circuito de la relación del sujeto a la demanda que Lacan escribe $ <> D, fórmula de la pulsion
21 La facilitación nos ofrece incluso una visión más profunda de la conformación de "La asociación por simultaneidad" tal asociación actúa durante los procesos reproductivos, la actividad pura de y consiste en la facilitación entre dos catexias, y , por Ej. en tanto su catexia se produjo simultáneamente. La simultaneidad misma constituye la conexión, el nexo, la facilitación entre una y otra letra. El pasaje de Qn entre dos huellas conectadas será tomado primero que cualquier otro no existente.
- 1.La cantidad de la catexia Qn. Se revela así equivalente del número de facilitaciones (2Qn se inscribe y , con lo que no seria así equivalente de la repetición de Qn dos veces)
- 2. el segundo factor: en la determinación del curso que sigue una cantidad Qn, no sólo se dirigirá a la que esté más facilitada, habilitada por la intensidad de su carga impresa, sino también a la letra que esté catectizada en su vertiente opuesta. Estos dos factores pueden reforzarse mutuamente o antagonizar-se en determinados casos.
22 Pág. 911 O.C.
23 la eclosión de los síntomas lleva impreso el complejo paterno, lee Freud en el Hombre de las ratas-. Los recuerdos hacen llorar, etc.
24 A lo que añadirá la hipótesis de que tales estímulos endógenos estarían constituidos en ambos casos por "productos químicos". Aunque suena mejor, físicos. No siendo, excluyentes.
25 "El Icc. es nuestro único acceso a lo real" J. LACAN
26" (...) si nous avons gagné quelque part quelque chose, c´est forcément, c´est sûr, au dépens d´autre chose; qu´en d´autres termes, si le discours analytique fonctionne, c´est sûrement que nous y perdions quelque chose ailleurs. D´ailleurs, qu´est-ce que nous pourrions bien perdre, si vraiment ce que je viens de dire, à savoir que tous les systèmes de la nature jusqu´ici surgis sont marqués de la debilité mental, á quoi bon tellement y tenir! Il nous reste quand même ces appareils-pivots dont la manipulation peut nous permettre de rendre compte de notre prope, j´entends á nous analystes, opération." Seminario R.S.I, 1RA CLASE, 10 DE DICIEMBRE DE 1974; J.Lacan. (versión DE AFI) Subrayado propio.
27 Podemos citar el Sexto parágrafo de "subversión del sujeto y dialéctica del deseo", pag. 796, Escritos 2, siglo veintiuno editores
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